BCO Noticias.- Redacción.

El fotógrafo mexicano Rodrigo Prieto adora los retos y los nuevos comienzos, y ese fue el enfoque que asumió con The Irishman, la película de Martín Scorsese que le valió su tercera nominación al Òscar.

La conematografia de Prieto ha teñido momentos de verdadera belleza, como en Babel de Alejandro a González Iñarritu o en Water for Elephants de Francias Lawrence.

Pero en su tercera colaboración con Scorsese el reto era estético y técnico por igual, al tener que compaginarse con la tecnología de rejuvenecimiento que uso el equipo de efectos visuales supervisados por el argentino Pablo Helman.